Salteamos los espárragos trigueros en una sartén con el aceite de oliva virgen extra durante 2 minutos hasta que queden bien dorados y los condimentamos con sal y pimienta al gusto.
Extendemos el queso ricotta en la rebanada. Partimos la mitad de los espárragos trigueros y los envolvemos con las láminas de jamón ibérico.
Finalmente, ponemos los espárragos con jamón encima del queso ricotta.